por Juan Webber

Juan Weber

Mi intención es redactar un artículo ligero y fácil de leer que ayude a quien no sea entendido de la raza para que pueda empezar a encajarla y reconocer aquellos aspectos que marcan diferencias con otros de su mismo aspecto. Para su mejor digestión, voy a desarrollar un pequeño sumario:

1. Historia
2. Actualidad
3. Carácter
4. Work deportivo y utilidad
5. Futuro

1. Historia

Si nos remontamos a sus orígenes, podremos comprobar que en Alemania, su país de nacimiento, el Schnauzer Gigante fue concebido como perro de utilidad, trabajando como boyero o conductor de reses de gran tamaño. Para poder realizar estas labores de manera eficaz, se requería gran fuerza y destreza por lo que se mostraban perros robustos, dispuestos a soportar todo tipo de climatología. Por su morfología y carácter, el Schnauzer Gigante resultó la raza ideal, considerándolo el perro de utilidad más completo de aquella época.

Con el paso de los años, estos trabajos se fueron extinguiendo y el Schnauzer Gigante quedó como perro de guarda para fábricas de cerveza, granjas, fincas, etc. Posteriormente pasaron a utilizarse por diversos cuerpos policiales como perros de frontera, de búsqueda y rescate de personas e incluso para combatir el contrabando. La realización de estas labores más especializadas nos indican la confianza que los cuerpos de seguridad han depositado en el Schnazuer Gigante debido a la fama que se ha ganado por su inteligencia, nobleza, carácter, capacidad y buen hacer para todos los tipos de trabajo de utilidad, no importando las condiciones y dureza de los mismos.

2. Actualidad

Morfológica y funcionalmente, el Schnauzer Gigante de hoy en día muestra algunas diferencias con respecto al de las épocas pretéritas, ya que, como en la mayoría de las razas, el humano se ha encargado de seleccionar a su antojo dejando atrás algunas de sus cualidades más primitivas. No quiero decir con esto que la raza no haya evolucionado sino que prácticamente ha desaparecido la presión ejercida sobre ella por la selección para el trabajo cotidiano. En el Schnauzer Gigante estéticamente ha habido un gran avance pero funcionalmente se ha quedado algo retardada con respecto a otras razas, sobre todo en España.

Por suerte, aún queda algún criador preocupado por mantener vivos sus orígenes y a la vez procurar su evolución morfológica. Ello nos da ánimos a los amantes de la raza para trabajar con estos ejemplares y llevarlos al lugar que merecen ocupar y que se han ido ganando ya desde sus comienzos. Ser bonito no es sinónimo de ser inútil, todo es compatible, sólo hay que encontrarle el punto.

3. Carácter

Hablando del carácter del Schnauzer Gigante debemos resaltar su gran temperamento a la hora de actuar en las diferentes situaciones diarias. No debemos pensar en un Schnauzer Gigante como simple perro de compañía ó de jardín (que también) ya que tiene un umbral de instintos muy elevado que, si lo sabemos encauzar bien desde su más temprana edad, haremos de él un animal muy equilibrado, seguro de sí mismo y con un gran potencial físico. Es muy inteligente y sensible con gran predisposición al aprendizaje lo que lo hace apto para gran variedad de utilizaciones si nos sabemos comunicar en su propio lenguaje.

Es de natural receloso con los extraños pero, bien canalizado, su fuerte instinto protector le hará diferenciar perfectamente las buenas intenciones de las malas. Para conseguir este prototipo, debemos sociabilizarlo correctamente desde que se separa se su primer entorno, madre y hermanos de camada. Debe conocer todo tipo de situaciones, personas, ruidos , etc. Para llegar a ser lo que pretendemos, un Schnauzer  Gigante potente, valiente, sociable y, sobre todo, equilibrado.

Al ser un perro enérgico y fuerte, debemos tener cuidado con sus juegos no reprimiéndolos sino ritualizándolos y controlando su ímpetu para darle la salida correcta y obtener un perro seguro de sí mismo. La represión y la falta de desahogo acarrearían dudas e indecisiones totalmente indeseables para su correcto desarrollo psíquico. Por lo tanto podemos afirmar que estamos ante un perro genuinamente deportivo y que el ejercicio físico ha de ser parte fundamental de su vida cotidiana.

El trato directo y la dedicación generosa se antojan imprescindibles ya que es perro de un solo dueño y se echa a perder abandonado al estrés de la soledad o pasando de mano en mano sin punto de referencia fijo.

4. Work deportivo y utilidad

Aquí hay tema para mucho más que un somero artículo. Sólo quiero apuntar que la situación actual del Schnauzer Gigante en España está muy lejana a lo que la raza puede y merece, siendo pobrísima su presencia en los diversos deportes caninos y pruebas de utilidad debido a una mezcla de ignorancia y falta de selección seria. Pero aquí estamos nosotros, exultantes de ilusión y ganas para poner remedio. Ya hablaremos.

5. Futuro

Tema más escabroso aún que el anterior, sujeto a polémica y sobre el que se vierten opiniones de lo más peregrinas. Sobre ésto todos opinan y muy pocos saben lo que dicen y aún menos por qué lo dicen. Pero tranquilos, lo iremos desgranando en sucesivos trabajos, serios y bien documentados, para dotaros de material base para opinar con criterio. Como he dicho antes, ya hablaremos…. largo y tendido.

Juan Weber
“Hubercan”

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