Las razas de trabajo son joyas genéticas cuyo valor está más en lo que atesoran en su interior que en lo que estéticamente aportan a nuestros sentidos. Actualmente, por razones obvias ( avances tecnológicos, sociedad urbana, comercialización masiva… ), en muchas de ellas se ha descuidado por parte incluso de los criadores más relevantes la selección de esos valores que las hicieron tan necesarias y como consecuencia tan deseadas. Pomerland , en su línea de ir un paso más allá de lo conseguido en el desarrollo del Schnauzer gigante , quiere contribuir a una mejora efectiva y práctica, despertando sus quizá un tanto adormecidas aptitudes como perro de utilidad en su más amplio concepto.
Nuestros ejemplares se han ganado reconocimiento internacional por su gran calidad técnica, fruto de más de una década de cuidada labor de cría, pero no nos sentimos aún satisfechos. Vamos pues a volcarnos ahora en el aspecto funcional, motivando la presencia de nuestro afijo en el mundo de las pruebas de trabajo para perros de utilidad, aportando novedad, belleza, y sin duda, triunfos, marcando diferencias con nuestros competidores y haciendo bueno el lema:
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